La Abuela Tuxpeña
¡YA FALTA POCO PARA QUE SE VAYA CHABELO DE CAEV!
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Queridos Nietos:
El otro día tuve una experiencia religiosa increíble y que quiero compartir con ustedes…
Fui a la librería cristiana y allí encontré una calcomanía para el auto que decía: ‘TOCA EL CLAXON SI AMAS A DIOS’.
Dado que había tenido un día muy malo, decidí comprarla y pegarla en la defensa de mi coche.
Al salir conduciendo, llegué al crucero de Tamiahua, y había muchos carros. La temperatura exterior era de 37 grados y era la hora de salida de las oficinas, y como están reparando la calle que dejó echar a perder Juan Ramón, ahí me quedé parada (porque la luz estaba roja), pensando en el Señor y en todas las cosas buenas que nos ha dado.
No me di cuenta que la luz se había puesto en verde, pero descubrí que muchos otros aman al Señor porque inmediatamente comenzaron a tocar el claxon… ¡Fue maravilloso!
La persona que estaba detrás de mi auto era sin duda muy religiosa, ya que tocaba el claxon sin parar y gritaba: ¡Arranca, por el amor de Dios!…
Dirigidos por él, todos hacían tocar el claxon. Yo les sonreí y los saludaba con la mano a través de la ventana, totalmente emocionada.
Vi que otro muchacho me saludaba de una manera muy particular levantando solo el dedo medio de la mano. Le pregunté a Diego mi nieto, que estaba conmigo, qué quería decir ese saludo.
Me contesto que era ‘un saludo hawaiano‘ de buena suerte. Entonces yo saqué mi mano por la ventana y saludé a todos de la misma manera.
Diego se doblaba de la risa, supongo que por la bella experiencia Religiosa que estaba viviendo.
Dos hombres de un auto cercano se bajaron y comenzaron a caminar hacia mi coche, creo que para rezar conmigo o para preguntarme a que templo voy, pero en ese momento fue cuando vi que la luz estaba verde.
Entonces, saludé a todos mis hermanos y hermanas y pasé el semáforo.
Después de cruzar, noté que el único auto que había podido pasar era el mío, ya que la luz volvió a ponerse en rojo, y me sentí triste de dejarlos allí después de todo el amor que habíamos compartido. Por lo tanto, paré el coche, me bajé, saludé a todos con el saludo hawaiano por última vez y me fui…
P.D. Ruego a Dios por todos esos buenos hombres y mujeres…
Besos, su Abuelita.
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